María del Carmen Maggi era profesora de Filosofía y Letras recibida con honores y docente en las escuelas Sagrada Familia y Minerva de la ciudad de Mar del Plata. El día 18 de agosto de 1973 fue designada secretaria académica a cargo del despacho de la Facultad de Humanidades de la Universidad Católica “Stella Maris”. “Coca” Maggi, que meses más tarde fuera nombrada decana, tenía en ese entonces 29 años cuando tomó la tarea de conducir aquella Facultad. La avalaba su prestigio académico y su compromiso con la educación. A la cabeza junto a las autoridades de “la Católica”, trabajó por la unificación y nacionalización con la Universidad Provincial, respetando los derechos e intereses de docentes, no docentes y estudiantes.
Dentro de una espiral ascendente en un contexto de marcada violencia política, las nuevas autoridades de la Provincial pusieron como condición de unificación la selección del personal docente y no docente. “Coca” Maggi estuvo entre las más fervientes opositoras a la elaboración de lo que significaba confeccionar “listas negras”. La Concentración Nacional Universitaria (CNU), que había tomado la conducción de la Universidad Provincial, la ubicó entre sus enemigos. El 15 de marzo de 1975, “Coca” Maggi fue suspendida de sus funciones docentes en dicha universidad. El 9 de mayo de aquel año, a las 02:30 hs. de la madrugada, un comando de la CNU la secuestró. Su cuerpo sin vida fue hallado el día 23 de marzo de 1976 en las proximidades de la Laguna de Mar Chiquita. El expediente judicial sobre su desaparición había sido “insólitamente” extraviado por la Justicia y la investigación fue archivada. El crimen fue considerado como un delito de Lesa Humanidad.
La vida, la obra y la desaparición trágica de “Coca” Maggi son testimonio de su época. Ella, como gran parte de su generación y de todas las generaciones universitarias argentinas, se embanderó con la defensa de la Universidad. Su lucha fue la de la construcción de una nueva universidad pública en Mar del Plata, gratuita, democrática y alineada con los intereses nacionales. Designar a la sede de la Facultad de Humanidades con el nombre María del Carmen “Coca” Maggi es darle dimensión a la decisión que cambió su vida y la de la nueva universidad. Al mismo tiempo que funda nuestra identidad como unidad académica, proyecta el horizonte de defensa de la universidad pública, gratuita y de excelencia académica.