Desde hace algunas décadas, las instituciones exigen a quienes se postulan como candidatos, para trabajar o para estudiar en ellas, que acrediten un determinado nivel en el dominio de un idioma.
Para ese fin, universidades, asociaciones de expertos y editoriales diseñan exámenes y organizan sus tomas en distintas partes del mundo.
El nivel que las instituciones exigen a los candidatos puede variar según los fines que se persigan. Sin embargo, en la mayoría de los casos, se solicita la acreditación de un nivel B1+ o B2; en otros, las instituciones piden un examen en particular.
Según el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas, hay tres niveles A, B y C, siendo A el básico. Cada uno de estos niveles, a su vez, puede dividirse, según criterios específicos. Para alcanzar cualquier nivel, es necesario tener en cuenta, fundamentalmente, la lengua madre del candidato, la lengua extranjera que se quiere acreditar y el tiempo de exposición del candidato a la lengua extranjera.
* CELU – para más información celumardelplata@gmail.com
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